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Seguridad infantil en la habitación del bebé

De colores chillones, pastel, neutras, de grandes dimensiones, reducidas, bien equipadas, con dibujos de famosos o anónimos personajes infantiles, iluminadas, neutras o con colores, dulces cuál cheescake o aventureras como una selva amazónica…

Sea cual sea el estilo decorativo que quieras darle a la habitación de tu bebé y que con tanta ilusión decoras, te damos las claves de seguridad infantil en la habitación del bebé, donde verás como crecimiento de tu peque se convierte en el mejor de los sueños.

Vamos por partes para que puedas realizar una lista de comprobación para evitar riesgos en la habitación del bebé.

Seguridad infantil en la habitación del bebé respecto a la instalación

En las paredes utiliza pinturas atóxicas y lavables que mantengan la higiene del espacio
Los bebés tienen una estrecha relación con el suelo, por lo que estos deben ser cálidos, ligeramente blandos y antideslizantes, favoreciendo el desarrollo motor y minimizando las consecuencias de las irremediables caídas durante la adquisición de las distintas habilidades. Instala alfombras infantiles que sean fácilmente lavables fomentando la higiene que requiere tu bebé, elimina todas las que sean textiles, fuente de alérgenos y ácaros.
Las ventanas y los balcones deben ser inaccesibles a la manipulación infantil (ojo con la ubicación de la cuna o cama debajo de las ventanas). Instala sistemas de bloqueos de seguridad infantil para ventanas o redes y mallas para ventanas y balcones de seguridad certificadas, evitando siempre las rejas permanentes. Si te decantas por esta última opción, recuerda que deben ser rejas de seguridad, evitando caídas desde la ventana, pero fácil de extraer en caso de incendio.
La posición natural de tu bebé es la de “tumbado” mirando hacia arriba, por lo que debes tener en cuenta este aspecto cuando te decidas por la iluminación infantil de forma que la sea cálida pero no dañe su, aún inmadura, desarrollo visual.
Los enchufes deben contar con protección infantil, no te olvides de los cables y dispositivos electrónicos siempre fuera del alcance infantil, ni tampoco de las regletas o tomas múltiples, también necesitan protección y mantener alejados de su manipulación.
Instala protección antipilladedos en la puerta, es uno de los accidentes infantiles más comunes, y de los que menos se hablan. Si te decides por un tope de puerta, evita los que sean llamativos y mucho menos de “animalitos”, si parece un juguete, es un juguete y querrá alcanzarlo por todos los medios. La seguridad infantil nunca debe llamar la atención de los peques, se integran en el espacio.
Si lo que quieres es evitar la salida autónoma de tu peque de la habitación, la solución pasa por instalar una barrera de protección infantil adecuada al espacio a cubrir.

Seguridad infantil en la habitación del bebé respeto al mobiliario y el equipamiento

La cuna de bebé debe cumplir con la normativa legal vigente y seguir las instrucciones del fabricante, el colchón firme y adecuado a la densidad del niño. En el interior de la cuna NUNCA pongas juguetes, muselinas, protecciones o cordones o como quieran llamarlo por muy cuqui que suene, tampoco almohadas, ni cojines anti vuelco, todo esto supone un grave riesgo de asfixia. Puedes encontrar más info sobre la seguridad en el sueño del bebé en la AEP (Asociación Española de Pediatría) y aquí tienes el enlace a un vídeo muy explícito sobre este riesgo en la cuna del bebé.
Los juguetes deben estar fuera de la cuna. No pongan nunca globos o guirnaldas que pueda manipular provocando una asfixia o estrangulamiento.
Las mosquiteras o doseles deben ser de seguridad, por lo tanto, no pueden ser largos para evitar juegos y estrangulamientos. Evita el dosel desde el primer día y utiliza mosquiteras ajustables a la medida de tu cuna.
Airea la habitación para conseguir un ambiente limpio evita recargarlo de olores. Puedes utilizar un purificador de aire eliminando alégenso, virus, gérmenes bacterias y contaminantes o un detox de productos naturales muy indicado si convives con mascotas.
Todo el mobiliario infantil debe tener bordes redondeados y carente de aristas e inaccesible a los herrajes u otras piezas desmontables, en caso de tener esquinas que puedan provocar lesiones en las caídas y golpes producidos durante el desarrollo motor, instala cubre esquinas y protección de bordes atóxicos y a prueba de mordiscos para evitar riesgos de atragantamiento.
Ancla todo el mobiliario auxiliar que sea inestable a la pared para evitar que pueda caerse encima del niño y también el que sea escalable (estantería). Nunca dejes objetos inalcanzables que puedan llamar la atención de tu bebé, recuerda que aprenden a escalar antes que a caminar.
Tú (y tu meñique del pie) también debes protegerte, por eso un punto de luz (quitamiedos) te ayudará a orientarte cuando tengas que atender al bebé de noche y no quieras encender la luz. Además, para muchos peques es un punto de referencia que les da seguridad y tranquilidad si se despiertan fomentando el descanso.
Las cortinas y los cordones deben ubicarse fuera del alcance de los niños para evitar peligrosos juegos con estos equipamientos, así como con los aparatos electrónicos y sus cables.
Los juguetes o elementos de decoración de la habitación deben ser adecuados a las habilidades y destrezas de los niños, además de estar accesibles a su manipulación, fomentando así la autonomía y el movimiento libre.
No instales cuadros, marcos, estanterías y cualquier objeto encima de la cuna para evitar la manipulación infantil o que caigan encima del pequeño.
El paso de la cuna a la cama debe realizarse en el momento adecuado, sobre todo si permanecer en la cuna supone un riesgo de caída desde la misma. Protegeremos al niño de caídas desde la cama con una barrera de seguridad para camas certificada para esta función, asegurándonos de que el modelo escogido se adapte a nuestra cama y no existan huecos de entre 10 y 25 cm para evitar atrapamientos.

Por último, recordar que los bebés van adquiriendo nuevas habilidades sin “avisar”, nunca los dejes encima del cambiador o cualquier otro equipamiento donde pueda darse la vuelta y caerse.

Esperamos que estos consejos os ayuden a toda la familia a tener los mejores sueños, aunque ya sabemos que durante un tiempo serán de corta duración, la seguridad infantil de la habitación del bebé y adaptar el espacio conseguirá un mejor descanso y un desarrollo feliz y sin riesgos.

Si necesitas ayuda para adaptar tu hogar al desarrollo de tu bebé, no lo dudes, contacta con el único organismo certificado, para ello, en la Asociación Nacional de Seguridad Infantil, te ofrecen el servicio profesional Babyproofing para que tu bebé pueda crecer en espacios adaptados a sus necesidades, evitando riesgos y la sobreprotección, fomentando el movimiento libre y la autonomía.

Puedes ayudar a otras familias difundiendo estos consejos de seguridad infantil en la habitación del bebé, también valorar el trabajo que realizamos en la prevención de accidentes infantiles citando la fuente y no solo porque así lo determina la actual legislación vigente de acuerdo a la Ley 23/2006, de 7 de julio, por la que se modifica el texto refundido de la Ley de Propiedad Intelectual.