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Detectando riesgos infantiles en invierno

“Detectando” riesgos infantiles en invierno

Las inclemencias del tiempo, los típicos resfriados, el anochecer prematuro… Y muchos juguetes nuevos por obra y gracia de SS.MM los Reyes Magos, con los que crecer y divertirnos, hacen del invierno la temporada ideal para decir aquello de “Home Sweet Home”

No es que la seguridad infantil en el hogar sea estacional, (Descarga el check list de seguridad en el hogar en este enlace) pero sí es más imprescindible en las temporadas en las que pasamos más tiempo en casa. Además, las características propias del invierno nos obligan a aportar un plus de prevención con base en los accidentes más comunes y que vamos a tratar en este post de seguridad infantil en el hogar, especial INVIERNO.

Prevención de quemaduras y de incendios

Si eres de los afortunados de disfrutar (ya sea en el hogar propio o no) de una relajante chimenea, ese poder hipnótico que ejercen las llamas en los adultos, en un pequeño, se convierte en una fuerte atracción a la que irremediablemente querrá acceder. Para evitar riesgos no podemos dejar el espacio sin supervisión (antónimo de “estar pendiente del móvil”) adulta.

La mejor medida de prevención para evitar quemaduras por contacto es la instalación de una barrera de seguridad infantil, pero ojo, aquí tenemos que tener en cuenta dos cotas en la instalación para que la seguridad sea realmente efectiva:

La barrera de seguridad se debe colocar a una distancia mínima de 75 cm.
Si se trata de fuego abierto, la distancia mínima debe ser de 90 cm.

Respecto a la prevención de incendios… DOS IMPORTANTES medidas preventivas

1. ¡Instalar un DETECTOR de humos SALVA VIDAS! Y ahora vamos a desmontar mitos (o fake news) respecto a quien pines que un DETECTOR DE HUMOS es:

Un coste elevado: nada más lejos de la realidad, menos de 20 € o lo que es lo mismo menos que ir toda la familia al cine.
Es muy complicado de instalar, obras de por medio: para instalar un detector de humo en 3 pasos debes (1) extraer el detector del envoltorio; (2) Poner la batería (pila) que incluye; (3) engancha con velcro o atornilla al techo. ¡LISTO!
No lo necesito: los incendios no solo se producen por tener una chimenea en casa, cortocircuitos, un extractor con grasa, … Todos podemos sufrir un incendio en nuestro hogar o propagarse desde otra vivienda o local.
¡Y la más peligrosa de las excusas: el “a mí no me va a pasar” cuando a TODOS nos puede pasar, ya sea en nuestro hogar o en el del vecino!

2. Jugar a autoprotegernos. Exigimos simulacros a los centros escolares de nuestros hijos, en nuestro puesto de trabajo… Y, ¿en casa? ¿Has pensado alguna vez como escapar de tu hogar en caso de emergencia? Realizando un plan de evacuación en familia no solo estáis educando a vuestros hijos en autoprotección, también se refuerzan los vínculos porque nos lo tomamos como un juego, y es que en definitiva a través del juego es como los niños aprenden.

Este vídeo de Bombers de Barcelona explica muy bien cómo actuar en caso de incendio a los niños, añadimos al mismo la importancia de que los pequeños aprendan el número de teléfono único de emergencias 1-1-2, evitando así que se tengan que memorizar demasiados números que en caso de una situación de intranquilidad puedan olvidar.

Prevención de intoxicaciones infantiles

En otras ocasiones ya nos hemos referido a las medidas preventivas para evitar intoxicaciones en el hogar, para no repetirnos, además del enlace, recordamos un proverbio japones

Un sitio para cada cosa y cada cosa en su sitio. Por ejemplo, si están (estamos) malitos, las medicinas a buen recaudo, aunque lo práctico sea dejarlas encima de la encimera, del mueble o de la mesita.

Una cita de Sócrates

¡Cuántas cosas no necesito! Reduce la carga de tóxicos. Revisa cuantas pinturas, barnices, pegamento, productos de limpieza, abrasivos… Tienes en tu hogar. Elimina lo que no vayas a utilizar, decántate por multiusos.

Y una verdad, verdadera

El silencio en una casa es oro, excepto si tienes niños. Olvídate del ruido visual y disfruta del ruido de tus hijos. NO hagas trasvases por muy cuquis queden para él insta. Los productos, siempre en su envase original, es imprescindible si alguna vez tienes que llamar al Instituto Nacional de Toxicología (24/365 en el teléfono 91 562 04 20)

Pero el mayor riesgo de intoxicaciones en invierno es el que llamamos “El Asesino invisible” más conocido como monóxido de carbono: para los niños en particular al ser más sensibles a los gases y para toda la familia en general por su letalidad.

Este gas venenoso, inodoro e incoloro se produce por la combustión incompleta del carbono producido en instalaciones tales como calderas, estufas, chimeneas, braseros, cocinas, automóvil, depósito de combustibles…

Los síntomas pueden ser parecidos a un cuadro gripal o una intoxicación alimentaria: dolor de cabeza, náuseas, vómitos, irritabilidad, temblores,… Llegando al letargo, la pérdida de motricidad y la inconsciencia.

Evidentemente, el riesgo existe en todos los hogares, por lo que tomaremos una serie de medidas preventivas:

Revisión anual de todos los elementos de combustión (por personal técnico cualificado)
Limpieza de los conductos de evacuación de chimeneas y estufas de leña
No utilizar braseros ni otros elementos de llama libre dentro del hogar
La salida de los gases al exterior debe estar libre de obstrucciones
No encender el motor del automóvil en un recinto cerrado
Permitir el ingreso del aire desde el exterior

Y por último: si el asesino invisible entra en nuestro hogar, debemos tener un delator que nos alerte de inmediato antes de que las consecuencias sean de una gravedad extrema llegando a la muerte. ¡Y ese salvador es el DETECTOR DE MONÓXIDO DE CARBONO!

Tampoco hay excusas para no ponerlo:

Su precio (valeee, es menos que ir toda la familia al cine y una cena en una hamburguesería)
Fácil de instalar, os lo explicamos en solo 2 pasos. (1) Extrae el detector de monóxido del envoltorio. (2) Enchúfalo en el punto más próximo a la fuente de emisión (por ejemplo, de la caldera).
A no ser que seas un oso y vivas en un iglú, SI lo necesitas
Y no nos engañemos: a TODOS nos puede pasar

¿Y la seguridad infantil fuera de casa?

Las medidas de prevención que como responsables de nuestros hijos llevamos a cabo en nuestro hogar, también deben ser tenidas en cuenta fuera de él: en casa de familiares y amigos, hoteles, casas rurales, campings…. Espacios donde nuestros hijos se desarrollan y no tienen por qué estar adecuados a sus necesidades de seguridad, por eso la supervisión adulta es la principal medida de prevención, exigiendo en instalaciones públicas otras medidas, la mayoría de ellas ya establecidas en diferentes decretos.

Enfatizamos en este punto el juego de la autoprotección con los pequeños cuando pernoctamos en un espacio diferente a nuestro hogar.

Por ejemplo, si al llegar a un hotel enseñamos a nuestros hijos el plan de evacuación y por donde debemos salir a un espacio seguro en caso de emergencia, conseguiremos que todos realicemos esta medida de prevención de forma mecánica siempre que nos instalemos en recintos similares: un gran paso educativo hacia una cultura preventiva.

¿La seguridad en el automóvil es la misma en invierno?

Básicamente, sí, solo recordar que, aunque pensemos que no pasa nada, tanto en invierno como en verano: No debemos dejar NUNCA a un niño solo dentro de un coche. La diferencia climática del interior respecto al exterior cuando permanecemos mucho tiempo dentro de un automóvil pueden tener graves consecuencias en la salud del niño.

Un aspecto diferenciador son las capas y capas y capas… Además del abrigo que le ponemos a nuestros pequeños en invierno, que además de caminar como un robot, en el automóvil ofrecen una falsa sensación de seguridad: cuando ajustamos el cinturón al abrigo, este no se ajusta al cuerpo del niño sino a la prenda con el consiguiente riesgo. ¡El arnés SIEMPRE debe quedar ajustado al cuerpo del niño, si vamos añadiendo capas de ropa esa sensación de ajuste es falsa y en caso de accidente el abrigo es lo único que permanece en el automóvil, el niño sale despedido!

Así que menos capas y los abrigos por encima una vez estén sentados en su SRI y bien ajustado el anclaje

¿Qué os ha parecido? ¿Habéis detectado algún riesgo más que queráis añadir? Contádnoslo, estaremos encantados de recibir vuestros comentarios y si creéis que puede ser útil no dejéis de compartirlo. ¡¡Gracias!!

Te agradezco que difundas este post de seguridad infantil para ayudar a otras familias con sus peques. También te agradezco que valores y respetes mi trabajo citando la fuente, además de que así lo marca la legislación vigente. Citarme es respetar, como a ti te gustaría que también hicieran con tu trabajo.